La humedad, el calor, el exceso o baja cantidad de riego, la falta de sol, las plantas muy juntas que no permiten que se aireen adecuadamente, demasiado abono o abono mal curado, la baja biodiversidad, en fin. Son muchos los factores que pueden provocar la proliferación de las plagas en tu huerto o jardín.
Como puedes ver, algunas de estas causas son tu responsabilidad, sin embargo la mayoría de ellas son el resultado de factores que no dependen de ti, como el clima o la humedad del ambiente, y, a pesar que éstos no los puedes controlar, lo que sí puedes hacer es reforzar los cuidados para asegurar el bienestar de tus plantas.
En este artículo no solo vas a conocer unas de las plagas más comunes sino también varias estrategias de cuidado que puedes aplicar para controlarlas o prevenirlas.
5 plagas muy comunes y cómo combatirlas
Plaga del pulgón: Es una de las más típicas en el mundo de la jardinería, para reconocerla debes fijarte en las hojas más tiernas del árbol o en la planta, si éstas las ves un poco arqueadas significa que tienes la plaga de pulgón, esto se debe a que los pulgones se ubican en la parte posterior de las hojas.
Puedes combatirlas utilizando un producto químico especial para este tipo de plagas. Sin embargo, es importante que sepas que las mariquitas son depredadoras naturales de los pulgones, así que cuando vayas a usar el producto químico, que sea uno que respete la vida de las mariquitas.
Babosas y caracoles: Estas dos suelen ser un gran problema en el jardín, ya que poco a poco se van devorando tus plantas, es muy común que muchas personas no hagan nada en contra de ellas debido a que también son seres vivos. Sin embargo, hay diferentes trucos biológicos que puedes usar para evitar la presencia de babosas y caracoles en tu jardín.
Puedes combatirlas de una manera sencilla, colocando un tarro de cristal en un agujero cerca de la planta o en la zona específica que quieres proteger y llenar el tarro con cerveza. De esta manera, durante la noche las babosas y caracoles se van a sentir atraídas por el color de la cerveza y se ahogarán en el tarro.
Mariposa de geranio: También conocida como mariposa africana, se instala en forma de larva dentro de los tallos y se vuelve oruga, verde y pilosa antes de convertirse en mariposa. Puede atacar a todo tipo de plantas y los primeros síntomas los podrás notar en los tallos, ya que van a tornarse negruzcos, blandos y con perforaciones. La planta no florece y se termina marchitando.
Puedes combatirlas pulverizando toda la planta con un producto específico, además debes cortar los tallos dañados y destruir todas las plantas muy afectadas, gracias a que no afecta las raíces, las plantas que están bien asentadas van a rebrotar luego de la poda drástica.
Cochinilla: Afecta con mucha facilidad todos los cítricos y también a las plantas de interior. Son pequeños insectos que se adhieren a la planta y van absorbiendo la savia. Esto lo que provoca es un debilitamiento y la planta puede llegar a morir, por ello es tan importante acabar con este tipo de plagas.
Puedes combatirlas con insecticidas químicos cuando la plaga es muy fuerte, pero en caso de que no sea muy fuerte, lo que puedes hacer es tomar un algodón bien empapado con alcohol y frotar en las zonas que haya cochinilla.
Araña roja: Éstas son el ácaro que más ataca en forma de plaga a las plantas. Lo que provoca es que las plantas se llenen de motas amarillas y pálidas, después se empiezan a arquear hasta que se secan y se caen. En ocasiones aparecen telarañas y lo curioso es que las arañas son casi imperceptibles.
Puedes combatirlas evitando la sequedad en el ambiente cuando la temperatura es alta, pulverizando con agua. Aplica de forma periódica un acaricida que actúe de forma sistémica, luego aplicas un segundo tratamiento dos semanas después.
Ya que terminaste de leer el artículo podrás identificar claramente las plagas de tu jardín y combatirlas de manera eficiente, recuerda que aunque no es responsabilidad tuya que aparezcan si puedes trabajar para ofrecerles a tus plantas todo el bienestar que requieren.
